La era que nos tocó vivir nos ha puesto a reflexionar sobre nuestro presente y futuro. Quizá nuestros planes que vislumbramos en el pasado nos han dejado ver como unos ilusos y confiados, o bien, como unos soñadores que siempre iban un paso adelante. Pero dejemos de hablar del “hubiera” porque de frente a nosotros tenemos el hoy y el mañana.
La crisis sanitaria trajo consigo la incertidumbre económica; el resultado del trabajo de mucho tiempo podría perderse si quienes toman decisiones o los mercados tienen un día terrible. Por ello, la inversión en inmuebles en esta época de cambios inesperados es una manera de asegurar tu patrimonio y tu tranquilidad.
Algunas de las ventajas de estas inversiones son:
Cuando ahorras tu dinero en una cuenta o en una caja fuerte, realmente estás solo acumulando “billetes y monedas” sin que este se “ponga a trabajar” a tu favor. Por ello, comprar un departamento o una casa es una buena opción: el valor del inmueble le ganará la carrera a la inflación debido al incremento de su valor.
Por ello, se puede pensar que la inversión en los inmuebles es una especie de salvavidas en medio del mar. Con él podrás flotar cuando haya alto oleaje y nadar hasta llegar a tierra firme. Estás a tiempo de hacerte de un inmueble y ganar tranquilidad en tiempos de cambio.