Las necesidades de quienes habitamos los espacios se transforman con el paso del tiempo. La razón es sencilla: las rutinas, la forma de pensar y nuestra forma de relacionarnos con nuestros entornos mudan al ritmo del transcurrir del calendario.
El año 2021 tiene presente dos corrientes de pensamiento arquitectónico con un fuerte arrastre. El primero se basa en un estilo limpio y minimalista; el segundo tiene una connotación de sensibilidad que procura inspiración y relacionarse con materiales. En ambos casos, tienen un punto en común: diseñan con geometrías sencillas y poco ornamento.
A continuación, te presentamos algunas tendencias en los espacios arquitectónicos:
Algunos de los arquitectos que consultamos para este artículo coinciden en que las nuevas construcciones, así como las remodelaciones, tienen que aspirar a utilizar materiales naturales para la reducción de su huella de contaminación. Esto se debe a la conciencia del cambio climático. Por ello, otra tendencia es que las construcciones estén vinculadas a lo artesanal y lo local.
Sin embargo, más que hablar de tendencias estéticas, hoy en día nos encontramos que la principal preocupación –y quizá podamos llamarla tendencia– es otorgar la mayor dignidad en su uso a quien habite un espacio, es decir, entender al ser humano como el fin último y no al objeto per se.